domingo, 16 de septiembre de 2012

Los muchachos que empezaron mal


Dos pequeños muchachos de California fueron arrestados en Reno por hurto de caballos. Estos habían partido desde Surprise Valley con una cabalgata de treinta animales, y dispusieron de éstos ociosamente a lo largo de su línea de marcha, hasta que fueron recogidos en Reno, como arriba explicado. Yo no me siento muy tranquilo sobre esos jóvenes, ¡lejos allá en Nevada sin sus testamentos! Donde no hay libros de escuelas dominicales los muchachos son tan aptos para jurar, mascar tabaco y robar cajas de esclusa, y una vez que un muchacho empieza a hacer eso último puede así mismo venderlo, ¡está obligado a terminar haciendo algo malo! Yo conocí una vez a un muchacho que empezó robando cajas de esclusa, y fue derecho de mal a peor, hasta que lo último que oí de él fue que estaba en la Legislatura del Estado, elegido por los votos demócratas. Usted nunca vio a alguien tomarlo, como su pobre vieja madre lo hizo cuando oyó sobre eso.
-Hank -dijo ella al padre del muchacho, quien estaba forjando un billete de banco en la esquina de la chimenea-, todo esto viene por no afilarlo cuando era un bebé. Si él hubiera aprendido a deletrear y cifrar, nunca podría haber sido elegido.
Me duele declarar que el viejo Hank no pareció ponerse algo más delgado bajo la desgracia familiar, y su apetito nunca lo dejó por un minuto. El hecho es que el viejo caballero quería ir al Senado de los Estados Unidos.

Título original: Boys who Began Wrong, publicado por primera vez en The Fiend's Delight, 1873, con la firma: "Dod Grile".
Imagen: Www.southwestart.com, Cowboy Paintings, XXI.